En vuestra vida laboral, seguro que habéis sentido en ocasiones que no estabais donde debíais estar, que ciertos ambientes no eran los adecuados para crecer como persona y te planteabas cuánta vida te cuesta tu sueldo. Es esa sensación de que a tu alrededor “todo vale” con tal de tener mejores ventas o resultados, e incluso yo he vivido que tus jefes te inciten a pisar a tus compañeros para hacerse ellos mejor hueco en la empresa. Son muchas las empresas que anteponen el éxito individual sobre el colectivo y muchos los profesionales que reservan su mejor hacer y más brillantes ideas para beneficio propio. Y ahí yo no encajaba, lo tenía claro.
Pero, afortunadamente, ahora es diferente, muy diferente. Estoy motivada y encantada. Desde siempre me han encantado los retos, sacan lo mejor de ti. Y en Stadium Casablanca con Bitevol y Emilio al frente de los nuevos proyectos de transformación digital, cada día es un reto que llega a buen puerto. ¿Por qué? Pues porque Emilio hace “magia” porque consigue que 1 + 1 sean 3. Y donde hay magia, no hacen falta trucos, sino trabajar con entusiasmo, ganas, tesón y, sobre todo, en equipo. Y los resultados se multiplican haciendo incluso que el salario emocional, tan olvidado por otras empresas, llegue al 100%.
Y es que Emilio al frente de Bitevol, está consiguiendo que seamos un “EQUIPAZO”. ¿Por qué?
Es un líder que guía los esfuerzos individuales, es parte del equipo.
Construye confianza, motivando un ambiente donde todos nos sentimos valorados, nos sentimos “grandes” en nuestra pequeña parcela del proyecto.
Sabe delegar confiando plenamente en que harás bien tu trabajo, haciendo que la motivación sume.
Cuando algo no sale a la primera como esperábamos y todos nos asustamos, él pone serenidad, trabajo duro y siempre acaba solucionándolo.
Reparte una misma tarea entre varios compañeros, generando esa sensación de objetivo común y no de rivalidad.
Impulsa la comunicación entre nosotros de todos los proyectos, de manera que cada uno puede aportar sus ideas, sus sensaciones y no sólo eso, sino que además, somos escuchados.
Nunca había oído tantas veces a nadie la palabra “equipazo” como a Emilio. ¡Y es tan importante escucharla! Cuando se dirige a nosotros diciendo: “buen trabajo”, “¡vamos equipo!” hace que te sientas parte de un todo que merece la pena.
Celebra los éxitos grupales con mucha fuerza. Por poner un ejemplo, este último viernes, después de unos …dejémoslo en “inconvenientes” de última hora, cuando conseguimos el resultado esperado aplaudimos con ganas y carcajadas, celebrando el éxito de todos.
Pero también hay que ser justos, no todo el éxito es de Emilio 😉 y es que…es verdad que somos un EQUIPAZO, tengo la gran suerte de estar rodeada en mi trabajo de personas encantadoras, empáticas, educadas, con ganas y que hacen que ir a trabajar sea un verdadero placer, un reto diario y un aprendizaje continuo.
Gracias Stadium Casablanca, gracias Bitevol, gracias Emilio,…gracias compañeros, gracias EQUIPAZO.