Una de mis películas favoritas es “La Princesa Prometida”. Sé que no es la mejor película de la historia del cine, pero me la sé casi de memoria diálogos, escenas, música….
Una de las escenas que más me gusta, es cuando Vizzini (diminuto genio siciliano) acepta la batalla de ingenio a muerte al “Misterioso Enmascarado”, que acaba de vencer en una épica lucha al gran espadachín español Íñigo Montoya (este nombre me pide a gritos “Tu mataste a mi padre…”) y al gigante Fezzik en una lucha cuerpo a cuerpo.
Siento destrozar esta escena para los que no la hayáis visto. El “Misterioso Enmascarado” da a escoger a Vizzini entre dos copas de vino, una de las cuales esta envenenada con “yocaina” (potente veneno que viene de Australia…). Tras una larga retahíla de pretenciosos razonamientos Vizzini escoge una y …. pierde la vida, ya que según explica posteriormente el “Misterioso Enmascarado”, ambas tenían “yocaina”, veneno contra el cual él, había desarrollado inmunidad.
Al igual que el “Misterioso Enmascarado”, durante nuestra vida, desarrollamos una serie de habilidades que no sabemos cuándo nos serán de utilidad, e incluso, alguna de ellas es posible que nos salve la vida.
Igual no es el momento para empezar a desarrollar inmunidad a algún tipo de veneno (o igual si), pero lo que seguro nos será útil, es desarrollar habilidades para gestionar algo que seguro nos puede matar: el estrés.
El estrés, no es algo malo, es un sistema de emergencia automático que actúa de manera inconsciente para ayudar a enfrentar/combatir los cambios, lo desconocido, de hecho, el estrés, nos ayuda a mantenernos vivos, a llevar la sangre a las piernas para correr más rápido, a pararnos ante un peligro, a tomar decisiones rápidas (que no siempre buenas) en momentos de peligro, a …
El problema está en que, en el mundo actual toda cambia a gran velocidad, estamos en constante cambio. Nuestro sistema de emergencia, el estrés, está siempre ON y con todos los recursos en marcha, con lo que supone para nuestro cuerpo en materia de energía, atención, desequilibrio, …. y si no somos capaces de gestionarla de manera consciente… Por no asustar no he querido poner cuales son los efectos del estrés mantenido, pero si alguno estáis dispuesto a asustaros, buscar en internet en la página de la OMS por ejemplo.
Aprende a gestionar tu estrés. Siempre hay alguien o algo que se empeña en estropearte el día. El resorte del estrés se dispara solo, pero trabajar en aprender a rebajar o incluso a desconectar sus efectos, depende de ti, e incluso puede ser una de esas habilidades que a veces, nos salvan la vida.
Ya sabes, “Yocaina” o Estrés, de ti depende.